Las placitas son un encanto, son como en todo pueblo de origen antiguo y terreno en pendiente, los espacios para descansar a nivel, entre calles elevandose.
En todas las plazas, y por el clima torrido en verano, los arboles son el componente ideal, las santa ritas con sus flores magentas son las que aportan sombra a los bancos rusticos.
Al igual que las callejuelas, las plazas son de piedra bien rustica y muros blancos.
En las plazas mas extensas son los lugares ideales para almorzar o cenar en las verandas de los bares y restaurantes.
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